El malabarista

Este artista nos tenía a todos embelsados, no sólo sostenía cuchillos y espadas de punta sobre su frente sino que para terminar de dejarnos con la boca abierta se puso ¡un arcón! en la cabeza. En palabras de Jesulín: "im-prezionante".
De los hombres dicen las malas lenguas que somos incapaces de hacer dos cosas a la vez, como por ejemplo masticar chicle y leer el periódico al mismo tiempo. Esto es un poco exagerado pero a mí me admira la gente que tiene destrezar manual. De pequeño ya me fijaba en cómo manejan los peluqueros ambas manos. Sí, un niño raro. Ya sé que hay cosas mejores en las que fijarse pero es innato en mí poner atención en cosas así. Y no es que yo sea torpe, de hecho soy perfectamente capaz de comprender las instrucciones de Ikea y de montar sus muebles. Pero a mi ritmo.
Tengo mal equilibrio, tanto es así que si dejo de mirar al frente al mismo tiempo que camino voy pelín inseguro. Bueno lo que quiero decir es que no puedo andar y volver la cabeza rápidamente. Tengo que girar todo el cuerpo y esto es un problema cuando te cruzas con algún bombón. Es como si no supiera donde tengo que poner los pies, me falta una referencia, por eso ya el simple hecho de tener la cabeza como la tiene el malabarista me produce vértigos. Pero yo soy así y así seguiré, nunca cambiaré larala la la la...
Por cierto ahora que canturreo, os he dejado nuevo video en el blog Canciones, hoy, "Déjame" de Los Secretos.